jueves, 25 de abril de 2013

Cruzando la línea




Cruzar la línea, entre la realidad y los sueños,
salir al exterior y sentir que te lleva el viento,
introducirte en los, recónditos, anocheceres de tu ser,
y saltar la muralla de tus miedos para poder vivir,
sintiéndote a salvo y por fin, descubrir,
que tu vida tiene un sentido :
el que TU decidas darle,
el que TU te atrevas a regalarte…

…Porque no hay puerta más infranqueable,
que la que pones tu, a tus metas,
porque no hay cerradura más perfecta,
que la que inventas tu, en tu mente,
 para no llegar donde, tu corazón,
 quiere llevarte, realmente…

…Porque no hay destino inalcanzable,
sinó cadenas que atan tus alas,
a los más absurdos miedos ,
que te impiden alzar el vuelo,
para hacer realidad tus sueños,
y poder vivirlos como ciertos.

¡Vuela, sueña, libérate!
para poder vivir,
lo que la vida te ofrece,
ámate, perdónate y agradécete,
por seguir mirando hacia adelante
y ser esa esencia que te hace inimitable.

Dedicada a tod@s mis amig@s bloguer@s y especialmente, a mi nueva amiga Isabel, con quien es un honor, seguir compartiendo tantos momentos y espero que por mucho tiempo ;)... también, cómo no, a mi fiel amiga Gemma y a tod@s l@s que seguís ahí, compartiendo nuestros caminos en esta vida.

Gemma-Enoa


martes, 9 de abril de 2013

Una lección de vida



El otro día conocí a una Señora de 86 años, hablar con ella, era recibir muy buenas energías, con aquella sonrisa tan contagiosa, dibujada en su cara, transmitía dulzura, serenidad, paz y alegría… lo que no me imaginaba era el motivo de su alegría..

…Tras intercambiar una corta, pero intensa, conversación con ella, me confesó ese motivo y sus palabras fueron : -me han dado seis meses de vacaciones- lo que tampoco me imaginaba, fue lo que me contó después y era que ella jamás había ido de médicos y últimamente, había tenido que ir bastante, por problemas bastante graves, que había tenido.. le habían diagnosticado un cáncer de hígado, ya bastante extendido y antes de la última visita, creía que iba a morir muy pronto, pero en la última, le dijeron que todavía le quedaban seis meses de vida.. y esa era su alegría. Os lo cuento tal cual me lo expresó ella…

…La verdad, me quedé sobrecogida, muy sorprendida por su reacción ante tal sentencia… le extendí mi mano y le dije lo único que podía pronunciar en esos momentos  : -pues a aprovechar cada minuto-  y me respondió, mientras apretaba mi mano, tiernamente, sin dejar de sonreir, ni un segundo : - eso es lo que estoy haciendo-. 

Un abrazo a tod@s mis amig@s bloguer@s y a tod@ el que me lea, gracias.

Gemma-Enoa